“Dejemos de hablar del jerez en clave de nostalgia. Bebiéndolo con moderación pero con frecuencia. El patrimonio solo tiene sentido si se proyecta hacia adelante, hacia las nuevas generaciones”
César Saldaña dictó este pasado martes en la Real Academia de San Dionisio la ponencia ‘Algunas reflexiones sobre el vino de Jerez, un patrimonio de todos”
César Saldaña Sánchez, Director General del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry, protagonizó este pasado martes, en la tribuna de oradores de la Real Academia de San Dionisio de Ciencias, Artes y Letras, la tercera ponencia del ‘Ciclo dedicado al vino de Jerez’ que esta docta institución cultural jerezana viene organizando durante las últimas semanas. El salón de actos de la Academia registró un lleno absoluto de público interesado en la conferencia que Saldaña tituló ‘Algunas reflexiones sobre el vino de Jerez, un patrimonio de todos’. Fue brillantemente presentado por el Académico de Número José Luis García Ruiz. Presidieron la sesión académica el presidente titular de la Academia Joaquín Ortiz Tardío así como el vicepresidente de Ciencias Jaime Bachiller Martínez y el vicepresidente de Artes Juan Salido Freyre.
Destacamos a continuación algunas de las reflexiones y afirmaciones subrayadas por César Saldaña durante su interesante intervención:
Ø El sector ha vivido en un permanente reajuste.
Ø Estos treinta años han requerido unos cambios brutales de nuestro negocio. Ha sido una evolución frustrante para mí, cuando deseamos la expansión y evolución del negocio. Soy una persona optimista. En lo profesional procuro ver la luz al final del túnel. Nunca hay que arrojar la toalla.
Ø Si de verdad importa el vino de Jerez, os daré un par de ideas al final de la ponencia. Ya han habido unos análisis muy detallados de la historia del sector. Hay una motivación personal para que no me enfoque en el pasado: el de la nostalgia. Particularmente abomino esa manera de vivir en el pasado. Y por ende en la conclusión de lo mal que está todo. Además los nostálgicos suelen estar mal informados.
Ø Los últimos treinta o cuarenta años sabemos que el negocio del vino de Jerez ya no es lo que era antes de los años 80. ¿Cómo era el sector antes? Al principio años 60, había muchos más bodegas pero no se vendía mucho más litros de lo que ahora vendemos. Todo el mundo tenía a algún familiar trabajando en alguna bodega, eso es cierto, pero eso se debía a una sobredimensión de las plantillas y a unos sueldos que distaban mucho de otros sectores.
Ø En los años 80 desaparecieron las ayudas estatales. Produciendo vinos que cuesta producir más que otros a un precio menor. Reducción de plantillas, huelgas, reproches. La situación entre el jerez y Jerez tenían que replantearse. Jerez cortó la mitad de su publicidad y luego la mitad de la mitad.
Ø Con este panorama… ¿cómo seguimos vivo? No logro entenderlo. La nobleza de nuestro producto es la respuesta, que todo lo aguanta. En estos años las principales bodegas han rentabilidad otros negocios que han ayudado a mantener el sector. No son pocas bodegas las que se mantienen por vender vino de Jerez, pero vino por lo que realmente valen. El jerez es una joya que no se sabe -o no es fácil- de vender. Hay que acudir al DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades). Un esquema esencial.
Ø Fortaleza: Marca de trascendencia mediática y distribución amplia. Debilidades: márgenes escasos, mensaje complejo, imagen madura, heterogeneidad sectorial, graduación alta. Oportunidades: hay grandes oportunidades. La ‘estrategia vino’, tenemos que relacionar nuestro producto al imaginario del vino, el jerez es un vino y hay que tratarlo como tal, y así asegurar una nueva generación de consumidores.
¿Quiénes son nuestros consumidores? Tres categorías: a) Consumidores tradicionales (hombres, aperitivo), b) Ocasionales (en ocasiones no buscadas, en Feria por ejemplo, no son entendidos) y c) Expertos (consumidores aficionados al vino, preferentemente en las comidas, pertenecen a ambos sexos). Es ley de vida que iremos perdiendo a los consumidores tradicionales. Hay que cuidar a los expertos de España, de Reino Unido, de todo el universo. Si jugamos bien nuestras bazas, ellos son los que nos volverán al esplendor.
Ø ¿Qué deberíamos hacer? Los futuros posibles. ¿A dónde queremos llegar? No hay movimiento para no quien sabe a dónde va. El sector presenta cuatro escenarios: a) el primero no hacer nada de lo que se está haciendo -es el que más miedo me da-, b) una primera acción activa: la estrategia nicho: atrincherarnos en los productos de marca de primera calidad, es una estrategia que acepta el sentido original del vino de Jerez. Debemos hablar más de uva, de gastronomía, de viñas. Tenemos que acabar con el precio único para la uva cualificada. C) otra estrategia es el volumen que nos permita a sectores más amplios de la población. Un análisis del diseño del producto. D) la estrategia mixta. Una adecuada segmentación de nuestra oferta. También cómo lo comunicamos. Sería necesario un alineamiento de los sectores profesionales.
Ø Un par de mensajes: a) Al sector: pónganse de acuerdo. Fijen una estrategia. La opción no hacer nada no sirve. B) Segundo mensaje: dejemos de hablar del jerez en clave de nostalgia. Bebiéndolo con moderación pero con frecuencia. El patrimonio solo tiene sentido si se proyecta hacia adelante, hacia las nuevas generaciones.